La economía mexicana se estancó durante febrero, luego de tres meses consecutivos con avances, y los analistas señalaron que los riesgos a la baja han aumentado considerablemente, lo que dificultará su recuperación.
Consideraron que se avizoran tiempos difíciles para la actividad productiva ante las crecientes presiones inflacionarias, mayores tasas de interés, menor dinamismo en Estados Unidos, así como la debilidad del mercado interno y de la inversión, principalmente.
El Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) avanzó marginalmente 0.01 por ciento a tasa mensual, informó el INEGI.