Redacción
Según informes, los científicos de la China comunista han diseñado una cepa mutante mortal del virus del Ébola. Los científicos chinos revelaron que las pruebas de laboratorio de la nueva cepa mataron a un grupo de hámsteres.
La cepa mutante fue desarrollada por un equipo de investigadores de la Universidad Médica de Hebei. El equipo utilizó una enfermedad contagiosa del ganado y añadió una proteína que se encuentra en el Ébola.
La proteína del Ébola permite que el virus infecte células y se propague por todo el cuerpo humano.
El grupo de hámsteres que recibió la inyección letal “desarrolló enfermedades sistémicas graves similares a las observadas en pacientes humanos con ébola”, compartió el estudio.
Los síntomas desencadenados por el virus incluyeron “fallo multiorgánico”.
Los hámsteres infectados desarrollaron secreciones en los ojos que perjudicaron su visión y cubrieron la superficie de los globos oculares.
La secreción afectó su visión y formó costras en la superficie de los globos oculares.
Los investigadores afirman que su objetivo era encontrar los modelos animales adecuados que puedan imitar de forma segura los síntomas del Ébola en un laboratorio.
Sin embargo, el experimento puede generar temores de otra fuga de laboratorio.
El estudio sugirió que los hámsteres infectados podrían ser un modelo decente para estudiar la propagación y el tratamiento del Ébola en el futuro.
El ébola debe manejarse en instalaciones especiales de alta seguridad de nivel 4 de bioseguridad (BSL-4), mientras que muchos laboratorios son solo BLS-2.
Para solucionar este problema en un entorno de menor seguridad, los científicos utilizaron un virus diferente llamado virus de la estomatitis vesicular (VSV).
Diseñaron el VSV para transportar parte del virus del Ébola llamado glicoproteína (GP), que desempeña un papel crucial para ayudar al virus a ingresar e infectar las células de su huésped.
Al hacerlo, los científicos pudieron aprovechar un vacío legal para eludir las normas de bioseguridad.
El equipo estudió cinco hámsteres hembras y cinco machos que tenían tres semanas de edad.
Todas las hembras de hámster sirio mostraron una disminución de la temperatura rectal y una pérdida de peso de hasta el 18 por ciento; todas murieron entre dos y tres días.
Los cinco hámsteres machos perdieron un 15 por ciento de peso y sucumbieron a la enfermedad a los tres días y medio como máximo.
Sin embargo, dos hámsteres machos sobrevivieron y ganaron un 20 por ciento más de peso que antes de la infección.
El equipo extrajo órganos de los animales muertos y encontró el virus acumulado en el corazón, el hígado, el bazo, los pulmones, los riñones, el estómago, los intestinos y los tejidos cerebrales.
Los niveles más altos se encontraron en el hígado y los más bajos en el cerebro.
En el artículo del estudio, publicado en la revista china Virologica Sinica, el equipo declaró:
“Es una señal de que los hámsteres sirios de 3 semanas infectados con VSV-EBOV/GP tienen la posibilidad de desempeñar un papel en el estudio de los trastornos del nervio óptico causados por la EVE”.
El equipo concluyó que los hámsteres infectados mostraron una rápida aparición de síntomas, shock hepático, infección sistémica y desarrollaron enfermedades sistémicas graves similares a las observadas en pacientes humanos con EBOV.
También señalaron que los experimentos proporcionaron una evaluación preclínica rápida de las contramedidas médicas contra el Ébola en condiciones BLS-2.
Los científicos concluyeron que el estudio fue un éxito.
El último gran brote del virus del Ébola se produjo entre 2014 y 2016 en varios países de África occidental.
Un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que el brote fue mortal.
Durante esos dos años, se informó que más de 28.600 personas resultaron infectadas y alrededor de 11.300 murieron.
El virus se propagó desde África occidental a Europa e incluso a Estados Unidos.
“El virus sustituto y el modelo de EVE [enfermedad por el virus del Ébola] de hámster mejorado mejorarán la seguridad y la economía de la investigación en el campo EBOV”, escribieron los investigadores en el nuevo estudio.
Es necesario realizar pruebas de virus infecciosos para lograr avances en el tratamiento y la prevención.
Sin embargo, ocurren fugas de laboratorio y estos incidentes podrían provocar que el virus se propague entre el público.
Los expertos han confirmado que los virus respiratorios, que se salvan al toser y estornudar, tienen más probabilidades de propagarse ampliamente entre la población.
Los datos publicados en marzo revelaron que los incidentes de fugas de laboratorio ocurren todos los años e incluyen la liberación de patógenos controlados como la tuberculosis y el ántrax.
Con información de Daily Mail
