Redacción
Aunque el caso de Boriska Kipriyanovich, el niño de Marte, no es reciente, ha llamado poderosamente la atención, pues fue denominado como un niño índigo, mostrando gran inteligencia; Boriska a decir de su madre, sabía leer a los pocos meses y a los 2 años comenzó a mostrar un amplio conocimiento de los planetas.
A principios del presente milenio Boris fue entrevistado por periodistas rusos quienes difundieron algunos videos en donde aparece el joven contando su historia, estas escenas no se volvieron virales hasta ahora, casi 20 años después, luego que la prensa se mostró muy interesada en conocer más acerca de él.
A los 7 años, el niño ruso reveló a sus padres que que había reencarnado en un habitante de la Tierra, y que en Marte había sido un piloto.
“Mi nombre es Boriska Kipriyanovich, de Rusia. Había vivido en Marte antes de renacer en la Tierra en una aparente misión de salvar a la humanidad. En Marte, la edad de los humanos se detiene en los 35 años. Era piloto espacial y morí en un accidente espacial en Marte.”
El niño marciano asegura que los de su raza se encontraban infiltrados en nuestro planeta y que el único fin de su misión es para advertirnos acerca de una inminente guerra nuclear.
El chico afirmaba que su propia raza, la marciana, fue casi exterminada hace miles de años a causa de un conflicto similar. Advierte que si no cambiamos nuestras políticas al respecto de las armas de destrucción masiva, nos esperará un destino similar.
El marciano aceptó que no era el único chico del espacio en nuestro planeta, ya que otras civilizaciones enviaban a miembros de su especie con misiones similares a la suya.
Kipriyanovich contó que a las personas que reencarnan de seres marcianos se les llama ‘niños índigo’.
Lo más increíble es que 20 años después, los científicos pudieron corroborar los datos que Boriska proporciono sobre los movimientos planetarios y complicadas ecuaciones de astrofísica que este pequeño les había enseñado.
Boriska también hizo una predicción: “La vida humana cambiará cuando se abra la Esfinge, tiene un mecanismo de apertura en algún lugar detrás de la oreja”, allí hace referencia a la gran Esfinge de Guiza que se encuentra ubicada en la ribera occidental del río Nilo, en la ciudad de Guiza en Egipto.
ASÍ LUCE BORISKA KIPRIYANOVICH EN LA ACTUALIDAD
Hoy en día Boriska es todo un hombre, tiene 27 años y sigue viviendo en Rusia, pero se rumora que vive en una pequeña ciudad y el Kremlin lo tiene bajo protección; aunque las declaraciones sobre su pasado en el planeta rojo han ido a menos, su increíble historia es digna de un guion de película.
En su momento afirmó qué después de la guerra nuclear, el planeta había intentado crear un sol a partir de Júpiter pero no tuvo éxito, lo que resultó en la “Gran Mancha Roja” que vemos en Júpiter.
Su madre asegura que, el pequeño Boriska pudo sostener su cabeza sin ayuda con solo unas pocas semanas de edad y hablar cuando tenía solo unos meses.
Boris ha revivido muchos recuerdos de su vida pasada en Marte, incluso a una edad temprana. Informó que los habitantes de Marte miden 7 pies de altura, viven bajo tierra y pueden respirar dióxido de carbono.
