Redacción
El Banco de México (Banxico) informó que durante el primer trimestre del 2023, los ingresos por remesas para Coahuila tuvieron un incremento de 14 por ciento en comparación con el año pasado.
Los datos reportados entre enero y marzo por Banxico, indican que el país percibió durante ese periodo un total de 13 mil 948 millones de dólares por este concepto, lo que representaría que el 1.8 por ciento fueron ingresados a la entidad.
Durante ese trimestre el estado recibió un total de 252 millones de dólares en el inicio del 2023, casi 32 millones de dólares más que lo captado en 2022, cuando el monto fue de 220.1 mdd.
Estos ingresos, son los que se realizan a través de giros internacionales en la banca, y mayormente, son enviados por personas migrantes que tienen familia en México y que residen principalmente en Estados Unidos.
Los principales municipios donde se registraron ingresos por remesas en el estado, son Torreón con la recepción de 63.71 millones de dólares, Saltillo con 27.7 y Piedras Negras con 25.6.
Al finalizar el 2022, Banxico reportó que Coahuila obtuvo un ingreso total de mil 49 millones de dólares durante todo el año, un 16 por ciento más alto que todo lo que fue captado en 2021.
Anotan récord
El banco central detalló que el 98.9 por ciento de los ingresos por remesas se realizó a través de transferencias electrónicas; mientras el 0.8% se realizaron mediante efectivo y especie y el 0.3% a través de money orders.
Tan solo en el mes de marzo llegaron a México 5 mil 193 millones de dólares, el monto más alto registrado en el presente año, situándose como el nuevo máximo histórico para un mes similar.
“En los últimos doce meses (abril 2022 – marzo 2023), el flujo acumulado de los ingresos por remesas se situó en 59 mil 936 millones de dólares, mayor al acumulado a doce meses de febrero previo de 59 mil 435 millones de dólares (marzo 2022 – febrero 2023)”, señaló el Banco de México.
Pese al incremento, Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico de Grupo Financiero Base, señala que las remesas llevan cuatro meses consecutivos perdiendo poder adquisitivo al pasarlas a pesos y ajustarlas por inflación.
