Redacción
En el tintero
Por Jessica Rosales
Hace algunas semanas platicaba con amistades sobre la ausencia de perfiles idóneos en la alianza PRI-PAN-PRD para dar la batalla a quien será el candidato o candidata de Morena a la Presidencia de la República en 2024, aunado a que inevitablemente ese partido hará uso de las instituciones para sacar ventaja.
Ante un escenario en el que la corcholata favorita del presidente Andrés Manuel López Obrador, Claudia Sheinbaum, lleva años haciendo campaña; o un Marcelo Ebrard de amplias habilidades para hacer política ¿Qué posibilidades tiene la oposición?
Y es aquí, donde surge uno de los mejores perfiles para competir en lo que llaman el Frente Amplio por México. Se llama Xochitl Gálvez, la senadora panista de raíces indígenas, origen humilde, luchadora, combativa, incisiva y trabajadora. Ingeniera y empresaria, en 1999 obtuvo el reconocimiento por el World Economic Forum de Davos Suiza como una de las 100 líderes globales del futuro mundo, y en el 2000 la revista Business Week la nombró como una de las 25 Latin American`s New Business Elite, entre muchos otros reconocimientos.
Gálvez fue directora general de la Comisión Nacional para el Desarrollo de Pueblos Indígenas, cargo del que logró su creación durante el sexenio de Vicente Fox Quesada.
Xochitl Gálvez, no solo conoce los problemas del país, los ha vivido. Ha compartido que su abuela murió en un petate por no haber accedido a los servicios de salud, de pequeña vendió gelatinas y estudió ingeniería en la UNAM, tras obtener una beca.
La senadora ha retado al presidente y lo ha sacado de su zona de confort. De hecho, es Andrés Manuel López Obrador, quien involuntariamente se convirtió en su principal promotor; primero, al mencionarla en su “mañanera” y calumniarla; luego, al negarle un derecho de réplica y cerrarle las puertas de Palacio Nacional pese a la orden de un juez.
En su reciente visita a Coahuila, en específico a la Laguna, Claudia Sheinbaum puntualizó que “es tiempo de mujeres” y tiene razón, esta será una de las principales armas de Morena para impulsar su candidatura y ganar simpatías. ¿Puede Santiago Creel o Enrique de la Madrid combatir la estrategia de género? Definitivamente, no.
Además, estos personajes, aunque cuentan con gran experiencia política y trayectoria en el servicio público les falta algo que el país está pidiendo a gritos, la cercanía con los ciudadanos, una candidatura ciudadana y empática que conozca en carne propia los problemas de la sociedad, pero esos políticos provienen de la élite.
Las cúpulas partidistas ya tienen en la bolsa el voto de la clase alta, Xochitl puede atraer a la clase media y a esa izquierda que esta confundida con algunos embates del Presidente. Viajando en bicicleta, luchando hasta encadenarse de un presidente del senado para evitar votaciones fuera de orden, esa es Xóchitl.
De acuerdo con el estudio de opinión pública digital de Saxum Media publicado en El Financiero, Gálvez, ha tenido en estos 15 días 498,789 menciones que generaron 2.3 millones de interacciones, en contraste con las 348,515 menciones y 1.5 millones de interacciones que logró Claudia Sheinbaum.
Marcelo Ebrard que quedó en tercer lugar con 197,934 menciones y 738,813 interacciones, y con Santiago Creel con 108,625 menciones y 431,985 interacciones. Adán Augusto López no alcanzó ni a Santiago Creel.
Y algo que no lograron las dirigencias del PRI, PAN y PRD lo hizo Xochitl, la posibilidad de sumar a Movimiento Ciudadano que ya ha dicho que se aliarán si la candidata es la senadora del PAN. Y surge el fenómeno Gálvez, con quien su principal contrincante Claudia Sheinbaum dice, en este momento, no quiere debatir. ¿Por qué será?
