“El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) nos dice que cada hora 12 personas renuncian a su trabajo por acoso y violencia”, cita la senadora Patricia Mercado Castro (Movimiento Ciudadano). Es momento de sacar de la congeladora de San Lázaro las reformas que el Senado aprobó para cambiar esa situación, dice.
La primera semana de julio entró en vigor en México el Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre la violencia y el acoso en el ámbito laboral. El próximo año, el país tendrá que rendir un informe sobre la implementación de las medidas que establece dicho pacto.
“Esperemos que, ahora que entró en vigor el Convenio 190, en la Cámara de Diputados retomen la minuta que mandó el Senado desde 2021”, expresa la también secretaria de la Comisión del Trabajo y Previsión Social del Senado.