Redacción
El senador Bob Menendez fue acusado de ayudar en secreto al gobierno autoritario de Egipto y de intentar frustrar el proceso penal de un amigo a cambio de lingotes de oro y dinero en efectivo, mientras los fiscales revelaban una acusación de corrupción que lo acusa de utilizar su influencia en asuntos exteriores para beneficio personal.
La acusación, la segunda en ocho años contra el poderoso demócrata de Nueva Jersey, de 69 años, alega una combinación ilegal de las obligaciones profesionales de Menendez como presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado para promover las prioridades de Estados Unidos y su interés privado en cultivar relaciones con empresarios ricos.
La acusación también incluye a su esposa y a tres empresarios de Nueva Jersey que, según las autoridades, colmaron a la pareja de dinero, oro y un automóvil de lujo a cambio de sus acciones en su nombre. Una acusación anterior contra Menendez derivada de diferentes acusaciones terminó en 2017 con un jurado estancado.
Horas después de que se revelara la acusación, el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, dijo que Menendez renunciaría como presidente del Comité de Relaciones Exteriores “hasta que el asunto se haya resuelto”.
Menendez está acusado de intentar descarrilar el caso penal contra uno de los empresarios al presionar para instalar a Philip R. Sellinger como fiscal federal para Nueva Jersey porque Menendez creía que podía influir en Sellinger. Los fiscales dicen que también intentó usar su posición de poder para intentar inmiscuirse en una investigación criminal separada realizada por la oficina del Fiscal General de Nueva Jersey.
Las autoridades encontraron en la casa de Menendez más de 100 mil dólares en lingotes de oro, y más de 480 mil dólares en efectivo, gran parte escondido en armarios, ropa y una caja fuerte, dijeron fiscales.
Las fotos incluidas en la acusación muestran dinero en efectivo metido en sobres encontrados en chaquetas que llevan el nombre de Menendez. Los investigadores descubrieron una búsqueda en Google realizada por Menendez sobre el valor de un “kilo de oro”, y el ADN de un hombre que, según los fiscales, lo sobornó con un sobre lleno de miles de dólares en la casa de Menendez, dijeron.
Los fiscales alegan que Menendez tomó repetidas acciones para beneficiar a Egipto a pesar del recelo de Estados Unidos sobre el historial de derechos humanos del país que en los últimos años ha llevado al Congreso a imponer restricciones a la ayuda.Sus medidas incluyen escribir una carta a sus colegas senadores animándolos a levantar la suspensión de 300 millones de dólares en ayuda a Egipto, así como transmitir información no pública a funcionarios egipcios sobre cuestiones militares, dice la acusación.
Menendez, en un comunicado enviado por correo electrónico, acusó a los fiscales de tergiversar “el trabajo normal de una oficina del Congreso” y dijo que no permitirá que su trabajo en el Senado se distraiga con “acusaciones infundadas”.
“Durante años, fuerzas detrás de escena han intentado repetidamente silenciar mi voz y cavar mi tumba política”, dijo Menendez. “Desde que se filtró esta investigación hace casi un año, ha habido una activa campaña de difamación de fuentes anónimas e insinuaciones para crear un aire de incorrección donde no existe”.
David Schertler, abogado de la esposa de Menendez, Nadine, dijo que ella “niega cualquier conducta criminal e impugnará enérgicamente estos cargos en los tribunales”.
Menendez parece ser el primer senador en ejercicio en la historia de Estados Unidos acusado de dos asuntos penales no relacionados, según la Oficina Histórica del Senado. Se enfrenta a la reelección el próximo año en un intento por extender su carrera de tres décadas en Washington mientras los demócratas tienen una estrecha mayoría en el Senado.
“Bob Menendez ha sido un servidor público dedicado y siempre está luchando duro por el pueblo de Nueva Jersey. Tiene derecho al debido proceso y a un juicio justo”, dijo el líder demócrata Schumer en una declaración enviada por correo electrónico.
Egipto ha sido durante mucho tiempo uno de los principales receptores de ayuda del gobierno estadounidense (más de mil millones de dólares al año) gracias a los intereses primordiales de seguridad nacional estadounidense en la región, pero la relación se ha puesto a prueba por preocupaciones sobre abusos de derechos humanos en el país.
Con información de AP
