Redacción
Por Luis Guillermo Hernández Aranda
Por dos días consecutivos el estacionamiento del Centro de Convenciones de Torreón lució lleno. El motivo: escuchar y ver a Xóchitl Gálvez quien la tarde del martes y la mañana del miércoles tuvo diferentes encuentros con ciudadanos, hombres y mujeres que ven en ella una posibilidad real de derrotar a la 4T.
A diferencia de lo que sucedió una semana atrás con la visita de Claudia Sheinbaum aquí no hubo camiones de acarreados, tampoco nadie se salió del evento antes de que terminara (a Claudia sus simpatizantes le dejaron sola a medio discurso en la plaza de Armas). Aquí tampoco hubo banderas de partidos, ni consignas a favor de un instituto político. El fenómeno Xóchitl está despertando a una sociedad que permanecía dormida.
A diferencia de los políticos tradicionales, Xóchitl Gálvez no trae un discurso acartonado, no le importan las poses ni el ser políticamente correcto. Vaya no es mamona e incluso en varias ocasiones les advierte a sus colaboradores que no sean sangrones.
Tuve la oportunidad de entrevistarla, junto con los Adictivos, 40 minutos sin cortes y varias cosas me llamaron la atención. La primera de ellas es que se le ve alegre, disfrutando su momento. Cualquier político cuando busca alguna posición siempre está a la defensiva, el mal genio es evidente, y con ella no es así, por el contrario, tiene la actitud de un equipo que nadie apostaba por él y está a punto de jugar la final.
Xóchitl tenía la mirada puesta en la Ciudad de México y apenas el 7 de junio tomó la decisión de convertirse en la representante del Frente Cívico y desde ahí buscar la presidencia de la república.
En cinco años ninguna figura política había preocupado a Morena y al gobierno de la 4T, en poco más de un mes Xóchitl Gálvez se ha convertido en su kryptonita. Si hablamos de futbol los trae vueltos locos y no les presta el balón.
Como senadora e integrante de la comisión de Seguridad tiene muy claro la estrategia que debe seguir el país para recuperar la paz, donde es necesario trabajar desde el ámbito municipal hasta el federal teniendo como común denominador el rescate de espacios públicos, el recuperar la dignidad de los ciudadanos y de las policías. Habla de una corporación nacional pero que sí investigue y realice el trabajo que la Guardia Nacional ha quedado a deber.
“Ustedes en Torreón y en Coahuila lo han hecho muy bien”, dice Xóchitl Gálvez.
Reconoce las diferencias del norte y sur, sobre todo en materia económica. Se dice convencida de las energías limpias y el potencial que tiene Coahuila. 40 minutos de entrevista y ningún enojo, se da tiempo para tomarse fotografías disfrutando el momento que está viviendo. Finalmente, Xóchitl Gálvez ha logrado aglutinar todo el enojo que hay contra la 4T y por eso los tiene tan preocupados.
