Redacción
En el tintero
Por Jessica Rosales
Tras los resultados positivos que obtuvo la alianza PRI-PAN-PRD en Coahuila en las elecciones de 2023 para la gubernatura, el Frente Amplio por Mexico replicó la fórmula para la jornada que vivirá el país en 2024 impulsando una figura ciudadana con Xóchitl Gálvez, dejando los intereses particulares y de partido de lado para recuperar la confianza de los electores.
Lo que nadie se imagino es que Morena también tomara el ejemplo de la entidad norteña pero en negativo con los pésimos resultados que obtuvo este partido en 2023 ante lo que muchos llamaron la imposición de un candidato que lo único que provocó fue la división y la ausencia de votos.
La historia se repite, Marcelo Ebrard interpreta hoy el papel de Ricardo Mejía Berdeja, pues igualito que el acapulqueño, el ex secretario de Relaciones Exteriores abandona el barco no sin antes exhibir la serie de irregularidades, ingratitudes, traiciones y hasta la violencia ejercida por su partido por opinar diferente y proponer acciones que no convenían a la favorita del Presidente.
El Partido del Trabajo y el Partido Verde Ecologista saben que no tienen opción y no podrían postular a Ebrard, ya que desde Coahuila fueron advertidos con ser blanco de venganzas si no se ajustaban a lo que mandaba el Presidente, por eso abandonaron a sus candidatos a la gubernatura Ricardo Mejía y Evaristo Lenin, respectivamente.
Marcelo Ebrard asegura que su partido actúa ahora como el viejo PRI, ¿Con eso sugiere que el PRI de ahora es distinto? Como ocurrió en Coahuila el rompimiento de quien, según Morena, quedó en segundo lugar en las encuestas, beneficia a la oposición, porque la militancia que sigue a este político también está molesta y decepcionada ¿A donde o para quién se irán esos votos?
Si bien Xóchitl Gálvez no ha alcanzado las preferencias de Claudia Sheinbaum, la salida de Ebrard del proceso y posiblemente de Morena le sumarán puntos a la senadora, y si el fenómeno que la ha impulsado se fortalece durante el periodo de campañas en el que ahora si pedirá abiertamente el voto, representa una fuerte contrincante para Sheinbaum.
Lo que es un hecho es que por primera vez en la historia del país a los mexicanos nos gobernará una mujer, y aunque esto debería significar un equilibrio en la contienda, es más que evidente que Morena hará uso de todas las instituciones para golpear a Xóchitl y no perder el poder.
Por otro lado, si el Presidente sigue encaprichado en jugar sucio y atacar a la candidata de la oposición lo único que estará haciendo es fortalecerla, pues finalmente fue el propio
Presidente quien decidió quién competirá contra quien en 2024, fue él quien dio a conocer a una gran parte de la sociedad la figura de Xóchitl y fue él quien decidió que la candidata fuera Claudia Sheinbaum en Morena.
Este jueves durante la traicional “Mañanera”, el Presidente de propia voz reconoció que su apoyo siempre fue para Claudia Sheinbaum, “Desde el principio yo lo dije, yo apoyo a Claudia”, declaró. Obviamente esto significó para muchos una orden para apoyar esa aspiración, cuando lo que debió hacer es mantenerse al márgen para que hubieran condiciones de equidad en la contienda.
También es cierto que en este momento López Obrador esta arrepintiéndose como nunca por no haberle abierto las puertas de Palacio Nacional a Xóchitl Gálvez, ya que de haberlo hecho tendría seguro el triunfo para su favorita con algún otro candidato más débil.
El 2024 se viene interesante y ya con un anticipo de los próximos capítulos, no se vaya muy lejos ya vio la película de Coahuila, y ahora será el estreno nacional rumbo a la Presidencia de la República.
